El Dolmen
de Axeitos o Pedra do Mouro
se encuentra en el lugar de Axeitos, en la parroquia de San Martiño de Oleiros
(Ribeira), al SO de la Serra do Barbanza, en una zona de pendiente suave a unos
42 m de altura sobre el valle del río Arte. El lugar donde se erige fue adquirido
en 1975 por la Diputación Provincial de A Coruña y en 1984 se realizaron obras
de acondicionamiento y acceso, como la construcción de un aparcamiento y de un
muro de cierre.
El de Axeitos es
uno de los dólmenes mejor conservados de la Península Ibérica y desde mi punto de
vista, uno de los más hermosos. Su fecha de construcción se estima entre el
4000 al 3600 a.C.
La
cámara del sepulcro es ovalada y está formada por siete ortostatos,
sobre tres de los cuales descansa la cubierta de 3,20 m X 2,40 m. La entrada de
la cámara se orienta al ESE y mide 1,12 m de ancho. Las dimensiones del
interior son 2,5 m de largo, 3,20 m de
ancho y 1,80 m de altura.
El
dolmen de Axeitos es un sepulcro de corredor, el cual originalmente constaba de
dos tramos de losas y medía alrededor de 2,5 m. Su longitud actual es de 1,5 m
y sólo se conservan tres losas que sobresalen unos 40 cm del suelo, habiendo
desaparecido la totalidad de su cubierta.
Podemos
señalar que uno de los ortostatos presenta en su cara interior un grabado en
forma de cruz y otro con un surco vertical y dos horizontales. Además, a unos 7,5 m del corredor se halló un ídolo
antropomórfico que probablemente fué depositado con posterioridad a la
construcción del túmulo.
Aproximadamente
a 1,9 Km del Dolmen de Axeitos, en el lugar de Cristal (Bretal, Olveira) y a
pocos metros de la iglesia de Nuestra Señora de los Dolores, podemos ver un
menhir descubierto en la segunda mitad de los años 90 del pasado siglo y que
actualmente se encuentra en la finca de una vivienda particular.
El menhir
de Cristal fue hallado a unos 100 m del lugar donde se encuentra hoy en
día, en una finca al otro lado de la carretera cerca del arroyo de Vilaverde, el
cual vierte sus aguas en la Lagoa de
Carregal, en Corrubedo. Según sus descubridores y propietarios de la finca donde se ubica, se
hallaba en posición horizontal y enterrado a unos dos metros de profundidad,
junto con otro menhir semejante pero de menor tamaño y otras piedras dispuestas
en círculo.
El
menhir de cristal mide 2,15 m de alto y presenta un lado recto mientras que el
otro es convexo. La base y la mitad inferior son subcilíndricas, con un grosor
máximo de 50 cm, y gradualmente va estrechándose hasta acabar en una punta roma
de unos 20X15 cm.
Su
superficie es muy regular y bastante pulida. En la mitad superior de una de
las caras hay grabadas nueve cazoletas, mientras que en la otra cara se aprecia
otra más. También se distinguen seis rebajes de unos 20-30 cm de largo y
14-8 cm de ancho, que probablemente fueron realizados con posterioridad a las
cazoletas ya que han dañado dos de éstas.
Los
menhires (del bretón men, piedra y hir, larga) o pedrafitas, son monolitos de
simbolismo fálico relacionado con la fertilidad y la regeneración, así como con los ritos funerarios y de ultratumba. En Bretaña aparecen a
menudo vinculados a monumentos megalíticos. En Galicia, debido al escaso número de menhires que se conservan en la actualidad, resulta difícil establecer esta relación. En este caso
parece que se confirma debido a la cercanía tanto al dolmen de Axeitos como a
otros grupos de túmulos, como las mámoas de Monte
Facho o de Outeiro Gordo.
Las fotografías de este artículo han sido realizadas por Francisco Javier Torres Goberna ©.
Gracias Francisco po lo teu traballo e a tua divulgacion
ResponderEliminar